Elena García Armada es una ingeniera industrial que nació en Valladolid en el año 1971. En el año 2009, obtuvo el doctorado en Robótica y se convirtió en científica titular del CSIC, es socia fundadora de la empresa Marsic Bionics y se especializó en el diseño de robots orientados a la industria. Ese mismo año conoció a Daniela, una niña de 4 años que a raíz de un accidente de tráfico quedó en un estado severo de tetraplejia, sus padres buscaban una manera de que su hija pudiera volver a andar.
Aquella experiencia marcó su vida profesional. Desde entonces su trabajo se centra en fabricar exoesqueletos para mejorar la capacidad física de los niños/as que han perdido su movilidad, especialmente de los que sufren enfermedades neuromusculares degenerativas. Los exoesqueletos refuerzan la musculatura que van perdiendo y contribuyen a la rehabilitación, generando en los chicos y chicas además una gran ilusión por poder moverse.
Fuente: EC Brands Studio
Siempre le han fascinado los juegos de construcción y los robots como los de Star Wars. Por suerte, ha recibido una educación totalmente imparcial, su madre es doctora en Física y profesora de Universidad y su padre era catedrático de Electromagnetismo por lo que nunca se vio forzada a elegir juguetes “de niña” y tuvo toda la libertad de estudiar lo que quiso y así fue como encontró su verdadera vocación.
Nos resulta admirable que una mujer haya elegido ese camino y que finalmente haya dirigido todos sus conocimientos y esfuerzos a ayudar a niñas/os con problemas de movilidad. Sin duda es un gran avance para su integración. Los exoesqueletos aún no son asequibles, por la dificultad y coste de fabricación pero pronto bajará su precio.
Referencias:
El 85% de la inteligencia humana procede de las emociones, algo que nunca tendrán los robots ctxt.es