Por la igualdad: 17

Una de las obras imprescindibles de la literatura inglesa, Orgullo y Prejuicio se publicó como obra anónima para después ser reconocida como una de las mejores escritas por la novelista Jane Austen y uno de los referentes de la literatura universal.

La novela, de carácter costumbrista, romántica, e incluso psicológica, narra la vida de la familia Bennet y de sus cinco hijas. Elizabeth Bennet, una chica inteligente, divertida y con muchos prejuicios, conoce al joven Fitzwilliam Darcy, un joven rico y orgulloso que considera a Elizabeth inferior a su clase social. La señora Bennet, la madre de Elizabeth, tras morir su marido, se da cuenta de que el matrimonio es la única manera de garantizar el futuro de sus hijas y el suyo propio, pues el primo de las muchachas Bennet, William Collins, es el único heredero masculino de la fortuna del difunto señor Bennet. Es ahí cuando comienza la historia entre una muchacha con numerosos prejuicios y un joven con demasiado orgullo.

Otro de los grandes clásicos de la literatura inglesa. Charlotte Brontë lo publicó bajo el pseudónimo de Currer Bell y consiguió una gran popularidad. Es considerada una autobiografía, pues hay muchas similitudes entre la vida de la autora y la protagonista.

La historia narra la vida de Jane Ayre, una muchacha inconformista y perseverante que es criada bajo la injusticia y el maltrato. Jane Ayre consigue imponerse a la adversidad y la pérdida para labrarse un futuro y conocer al amor de su vida.

Jane Ayre fue una obra muy controvertida por la forma de ser de su protagonista y por su manera de ver el mundo. Es considerada por muchos como una de las primeras novelas feministas.

Sería un pecado hablar de Charlotte Brontë y no mencionar la única novela de su hermana, Emily Brontë, Cumbres Borrascosas. Del mismo modo que hizo Charlotte, Emily también lo publicó firmando con un pseudónimo, Ellis Bell, para evitar las dificultades de publicación por ser una mujer.

La estructura de la novela, poco apreciada en su época, y el reflejo de las emociones humanas, son los puntos fuertes de la obra. Esto último perfectamente representado en el carácter de la protagonista femenina, Catherine Earnshaw, una muchacha orgullosa, egoísta y enérgica.

La obra cumbre de Nathaniel Hawthorne retrata de forma inigualable el carácter hipócrita e injusto de la sociedad de la Nueva Inglaterra de principios del siglo XVII, además de profundizar en temas tan complejos como la culpa, la vergüenza y la resiliencia. Su protagonista es una de las  primeras protagonistas femeninas de la literatura americana.

Hester Prynne, una modista que vive en la América colonial, es condenada por adulterio y llevar una enorme letra “A” siempre visible como castigo por su crimen. Ella, bajo las amenazas y la humillación pública durante el resto de su vida, se niega revelar el nombre del padre de su hija, Pearl.

Pocos personajes femeninos hay tan fuertes como el de Hester Prynne, y su autor dudó en mucho en el éxito que podría llegar a tener su novela. Está claro que se equivocó.

Novela de referencia del realismo, Madame Bovary es considerada como una de las grandes obras de la historia de la literatura y fiel reflejo de la alta sociedad francesa de principios del siglo XIX.

Emma Bovary es un personaje marcado por sus expectativas y aspiraciones, que se deja arrastrar por sus pasiones y por la perspectiva de una vida mejor. Su matrimonio con Carlos Bovary resulta ser tedioso y aburrido, que unido a la falta de objetivos personales, la hacen caer enferma constantemente. Encuentra la felicidad en la compañía de varios amantes que acaban abandonándola y, poco a poco, va adquiriendo deudas cada vez mayores que la empujan de nuevo a la enfermedad.

Este drama habla sobre el deseo y la satisfacción de este, y ha sido catalogado como la prosa que más se acerca a la poesía.

Con la Guerra Civil estadounidense como telón de fondo, Mujercitas narra la vida de cuatro hermanas de Massachusetts y su transición hasta convertirse en mujeres. La novela posee un tinte autobiográfico, pues la autora quiso reflejar en ella el hecho de haberse criado con otras tres hermanas.

Josephine March, la protagonista de la historia, es un personaje autobiográfico, actúa como alter ego de Louisa May Alcott. Es un personaje complejo que trata constantemente de alejarse del papel femenino tradicional, que no quiere adaptarse a los estereotipos de cómo debería actuar una dama. Su carácter fuerte y sarcástico la ha convertido en uno de los mejores personajes femeninos de la historia de la literatura.

Un curioso relato que narra de forma magistral un solo día de la vida de Clarissa Dalloway que la revista Time incluyó en su ranking de las 100 mejores novelas de lengua inglesa entre 1923 y 2005.

La estructura de la novela salta en el tiempo constantemente a través de la mente de sus protagonistas, pero toda la acción se reduce a los preparativos que Clarissa Dalloway realiza para una fiesta en un solo día.

El personaje representa el feminismo y la represión sexual y económica de la mujer del periodo de entreguerras. Además, retrata temas como la bisexualidad, el colonialismo, la depresión o la felicidad.

Pocos personajes en la historia de la literatura tuvieron tanta repercusión en el mundo del cine como el de Scarlett O’Hara de Lo que el viento se llevó.

Un personaje de personalidad complicada que muestra un carácter caprichoso, egoísta y manipulador. Su gran temperamento y su voluntad la llevan a conseguir todo lo que se propone. Una mujer que desea al único hombre que no puede tener y que es estigmatizada por la sociedad norteamericana de la época por su independencia y resolución.

Ganadora del premio Pulitzer, Matar a un ruiseñor se convirtió en un éxito de ventas instantáneo y una de las mayores representaciones de la literatura norteamericana.

La novela narra una historia costumbrista de la vida de una niña de 6 años, Scout Finch, durante la Gran Depresión en un pueblo ficticio de Alabama, que al mismo tiempo sirve como marco para el seguimiento de un supuesto caso de violación de una mujer blanca por un hombre de color. Scout es la narradora de la historia, y su padre, Atticus Finch, es el encargado de defender al supuesto violador en los tribunales.

La novela trata de forma magistral temas como el racismo, la injusticia racial o la pérdida de la inocencia. Asimismo, el personaje de Atticus Finch ha servido como ejemplo de integridad para muchos abogados y catalogado como la “imagen de ficción más duradera del heroísmo racial”.

Gracias a su adaptación en formato miniserie para la popular plataforma Netflix, la obra de Walter Trevis, escrita en 1983, goza de un éxito sin precedentes. La novela narra la historia de Beth Harmon, una niña prodigio del ajedrez que pretende abrirse paso en una disciplina de marcada tendencia masculina en los Estados Unidos de los 50. Con el objetivo de convertirse en la mejor ajedrecista del mundo, comienza a ganar popularidad mientras lucha contra su adicción a los tranquilizantes y el alcohol.

Sus principales temáticas son el ajedrez, el feminismo, el alcoholismo y la drogadicción. La muerte de Walter Trevis un año después de la publicación de la novela, dejó en el aire si el personaje de Beth Harmon tenía alguna inspiración real, aunque el propio Walter Trevis era un gran aficionado del ajedrez y padeció, igual que la protagonista, problemas con el alcohol y los fármacos.

La exitosa saga Millenium, del autor sueco Stieg Larsson, dio a conocer a uno de los personajes femeninos más fuertes de los últimos años y ha sido catalogada como “la cara del nuevo feminismo” o “la nueva heroína del siglo XXI”.

Lisbeth Salander, una investigadora privada de gran inteligencia y la mejor hacker de su país, se ve envuelta en una trama de investigación, suspense y misterio en la que ayudará a un periodista a resolver el misterio de la desaparición de una joven 36 años atrás.

La repentina muerte del autor en 2004, que tenía planeado escribir 10 novelas para la saga, dejó muchas dudas respecto a la inspiración del personaje. Se dice que Lisbeth fue producto de un suceso traumático que presenció Larsson en la adolescencia, una violación grupal de una chica con el mismo nombre, y que aquello le marcó por no hacer nada para evitarlo. Posteriormente, un amigo de Larsson apuntó que aquello nunca ocurrió y que el propio autor había oído la historia y la contaba como propia. También se dice que el estilo del personaje estuvo inspirado en su sobrina, que vestía con estética gótico/punk.

También popularizada por su adaptación a la gran pantalla, la trilogía de Los Juegos del Hambre fue publicada en el año 2008 y ha vendido millones de copias en todo el mundo. Cuenta la historia en primera persona de Katniss Everdeen, un adolescente de 16 años que vive en el país ficticio de Panem. Cada año, un chico y una chica de cada distrito del país están obligados a participar en una batalla a muerte entre ellos mientras se retransmite por televisión.

La autora, Suzanne Collins, ha reconocido en varias ocasiones la influencia de la mitología griega y romana en la historia, sobre todo en el relato del héroe Teseo y su confrontación contra el monstruo Minotauro. Los temas principales de la novela pasan por la pobreza extrema, las consecuencias de la guerra y la opresión.

La Trilogía del Baztán, de la autora Dolores Redondo, es una de las grandes muestras de la novela negra nacional con un personaje femenino que se queda fuera de los estereotipos del género. Alabadas por las minuciosas descripciones de trabajo policial, narra la investigación de una serie de asesinatos que parecen tener tintes paranormales.

La inspectora Amaia Salazar, inteligente, luchadora y superviviente, es el hilo conductor de un tema subyacente a la trama que radica en el rechazo de muchos compañeros policías por el mero hecho de ser mujer, además de ser su jefa. La obra también pone encima de la mesa temas como el abuso y la superación personal.

Uno de los grandes descubrimientos de la fantasía épica de nuestro país, galardonada en 2017 con el I Premio Caligrama en la categoría Promesa. Los autores, Lola Basavilbaso y Luis Constante, han creado a uno de los personajes femeninos más complejos de los últimos años.

Con solo 17 años Ahesshaye se ve obligada a asumir la carga del antiguo legado de su familia, una responsabilidad que, para muchos, nunca debería haber recaído sobre los hombros de una mujer que es, además, mestiza. Un personaje valiente, determinado, perseverante y de carácter turbulento que se ve envuelto en la búsqueda de una reliquia que podría cambiar el curso del mundo.

El recorrido del personaje todavía no está completo, pues solo se ha publicado la primera parte de la trilogía de Êrhis, pero no cabe duda de que la voluntad de Ahesshaye va a dar mucho que hablar.

De origen algo incierto, se trata de una obra que recopila cuentos tradicionales de Oriente Medio que utiliza el relato enmarcado como recurso principal.

Scheherezade, narradora y protagonista de la obra, es uno de esos personajes femeninos destacados por su ingenio. El sultán Shahriar, que se desposaba cada día con una una mujer y al día siguiente la mandaba ejecutar, se encuentra con Scheherezade, y está, con el objetivo de aplacar su ira, comienza a contarle una historia que enlaza con la siguiente, y la siguiente con otra más, así hasta mantenerlo despierto toda la noche y enseñarle, a través de las historias, una lección de humildad, moralidad y amabilidad.